Roger Waters - Dark Side Of The Moon - Santiago 14 de Marzo 2007

Alucinante, maravilloso, increible, especial, sobrecogedor, no consigo encontrar un solo calificativo para describir el recital que ayer ofrecio Roger Waters en el Estadio Nacional.

El espectaculo comenzó con "In The Flesh", cuando sonó el primer acordé y se produjo una explosión en el escenario que nos produjo un sentimiento de sobrecogimiento a los miles de seres que presenciamos este espectaculo, nos dejó los pelos erizados completamente, luego de este tema hizo un viaje por varios clásico como "Mother", "Shine on Your Crazy Diamond", "Breathe", "Time" y "Wish You Were Here", luego de esta revisión de clásico de otros discos, el genio se tomó 15 minutos para recuperar energias y regresar con lo esperado por todos, "The Dark Side Of The Moon" en pleno, con todo su esplendor, mágia, ilusiones, efectos visuales y emosiones.

Cerca de las 22:30 de está mágica noche Roger Waters vuelve al escenario y nos deleitó por poco más de una hora con el espectaculo de "The Dark Side Of the Moon", el juego de luces, imagines, efectos y sonido se confabularon con nuestros oidos, nuestros cerebros y todos nuestros sentidos, para crear recuerdos que van a permanecer tatuados en nuestra memoria individual y colectiva por siempre, una vez terminada esta descarga de emosiones, Roger Waters se retiró del escenario, pero solo para ser ovacionado por los más de 50 mil seres que estabamos en ese momento en el Estadio Nacional, y volvió con una sorpresa aún mayor, el broche de oro de esta mágica y maravillosa noche.

Sube nuevamente al escenario y saca de su bolsillo un papel y comienza a leer en español, un español muy básico, pero lo suficiente para poder entender que le teniamos que dar una fuerte bienvenida a los niños de una escuela de San Joaquin, con quienes cantó el mundialmente conocido "Another Brick In The Wall", momento en que el Estadio Nacional estalló en una euforia colectiva de emosiones, aplausos, y todos coreabamos a ese puñado de niños que acompañó al genio en esa genial canción.

Fue realmente una noche maravillosa, inolvidable, alucinante, mágica, cargada de emosiones, que en lo personal no voy a olvidar nunca, por que nunca pensé ni imaginé que iba a poder verlo en vivo, y menos me habia imaginado que iba a compartir esta experiencia con mi gran amiga Pun.

GRACIAS ROGER WATERS POR ESTOS MARAVILLOSOS RECUERDOS.